La Direction déléguée de la Régulation du Domaine Public et des Mobilités (RDPM) desempeña un papel fundamental en la gestión de la ocupación del dominio público, con la misión de garantizar el orden, la seguridad y la fluidez de la vida urbana. Su intervención afecta a diversos aspectos de la vida cotidiana de los residentes, comerciantes y usuarios de la vía pública, con un objetivo común: garantizar un entorno de vida armonioso y seguro para todos.
Una de las principales misiones del Departamento Delegado de Dominio Público y Regulación de la Movilidad (RDPM) incluye la gestión de las molestias generadas por las terrazas de cafeterías, restaurantes u otros comercios, que pueden invadir las aceras o el espacio de circulación.
En cuanto a los usuarios de la vía pública, la policía municipal interviene en varios frentes. Ante el aumento del número de peatones, ciclistas, coches y comercios, la policía municipal debe garantizar la seguridad de los ciudadanos, pero también posibilitar un uso razonado del espacio, para evitar conflictos de uso y garantizar a todos su derecho a un entorno seguro.
Controlan el aparcamiento en la vía pública para evitar congestiones y facilitar la circulación de vehículos, sobre todo en las zonas más concurridas de la ciudad.
La policía municipal es la encargada de controlar el aparcamiento en la vía pública para evitar congestiones y facilitar la circulación de vehículos, sobre todo en las zonas más concurridas de la ciudad.
En la práctica
